viernes, 12 de agosto de 2011

Más sobre las tutorías

Bueno, vamos a ver cómo lo digo finamente... que no nos enteramos.

La orden que regula las nuevas tutorías de secundaria no cambia nada. Si os fijáis en el texto de la orden, a los centros públicos se les obliga a dar esos apoyos, pero a los concertados/privados se les da la libertad de elegir. Hay diferencia semántica entre deberá y podrá, creo yo...

Me parece totalmente denigrante este tema, para empezar. No todos queremos un complemento por ejercer la tutoría (corrijo, porque se de algunos que les gusta un euro más que un tonto un lápiz): queremos nuestra hora lectiva con nuestro grupo.

Es parecido a lo de Bachillerato, pero distinto, porque para los chicos de este nivel esta hora, a 7ª, no es lectiva (no obligatoria por tanto su permanencia). Y es que la cosa quedaría así:
  • los niños tendrán un horario de 30 horas lectivas semanales (6 clases al día). Una de ellas será el famoso refuerzo de Matemáticas/Lengua/Inglés que impartirá un profesor especialista, claro.

  • en esa hora, el tutor del grupo, que no tendrá clase ni guardia, pero estará de permanencia / "otra complementaria" en el centro, puede entrar a sacar a un niño, o dos, o los que necesite, como si tiene que pedirle parte de la hora al compañero, porque tenga que hablar con todo el grupo. Pero esto supone que se está interrumpiendo una clase, no lo olvidéis, aunque esta sea de una hora semanal.
Un problema añadido a esto, es que, si cada niño recibe el refuerzo según su necesidad, esto implica:
  • que se han hecho los grupos por curso en función de quién necesita cada refuerzo (no deseable, pues se trata de un nuevo tipo de segregación).
  • que en esta hora cada niño se marcha al refuerzo que necesite (desdoblar CADA nivel en 3 asignaturas simultáneamente).
Creo que los centros optarán por la segunda propuesta, lo que implicará que un tutor debe interrumpir hasta tres clases distintas para encontrar a varios niños (¿y dónde se reúne con ellos, que esa es otra?: en el pasillo).

1 comentario:

  1. Se trata de un chapuza monumental, inviable en un centro educativo y nueva prueba de la ineptitud y/o mala baba de la actual Consejera de Educación y su camarilla. El hecho real, que los profesores sabemos, es que todo ésto no les importa lo más mínimo. Sólo han pensado en ahorrar costes de la pública o mejor dicho, en desviar el dinero destinado a éste fin hacia otras organizaciones educativas más acordes con su ideario ultraconservador y segregador. Las consecuencias que se deriven de este infame trapicheo para nuestros alumnos les traen al fresco ...de momento. Hasta que todos los implicados no protestemos en serio, no empezarán a preocuparse. A los profesores con conciencia no nos van a callar con cuatro o cuatrocientos cochinos euros. No somos como ellos

    MissTripsy

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